La afectividad empieza por vos! 💛
“Esencialmente, ni el tocar ni el masaje son sexuales. Son funciones del amor. El Tacto Consciente se necesita en el mundo de hoy porque el amor ha desaparecido”.
Osho, De la medicación a la meditación.
La piel es el órgano de nuestro cuerpo cuya extensión y peso es mayor que la de cualquier otro. Por los propios impulsos humanos de libido hacia el bienestar, deseamos tocar, tocarnos y ser tocados. Cuando esto sucede de forma gustosa, cuidada, elegida y relajada, sentimos placer. El placer genera -y a su vez, es generado por- la segregación de una cascada hormonal que lo acompaña y lo expande por todo el cuerpo. Cabe destacar a la oxitocina dentro de el cúmulo de hormonas producidas.
Te dejamos una propuesta de auto-masaje para que integres en tu cotidianidad y recuperes el antiguo arte de auto-regularte ↓↓
☑ Elegí algún aceite que te guste. Ideal aceite de coco (si tenés piel aceitosa o caliente) o de sésamo (si tenés piel fría o seca)
☑ Generá un espacio de intimidad para vos, donde puedas relajarte (silencio, musiquita, aromas, lo que gustes), y aflojar tu ropa o estar desnudx
☑ Ponete un poco de el aceite elegido entre las manos, frotalo hasta que se entibie
☑ Lleva tus manos a tus trapecios , los músculos que unen tu cuello con tus hombros
☑ Date unos minutos de masaje relajante. La clave es que te masajees con amor, no para “arreglar algo”, sino para darte placer y afecto.
☑ O tra clave es respirar profundo y exhalar por la boca mientras te masajeas
☑ Volvé a ponerte un poco de aceite entre las manos
☑ Lleva tus manos a todo el espacio del pecho: Esternón, axilas, pechos o pectorales, y masajeate nuevamente con amor, observando qué tipo de masaje necesita cada una de estas zonas (puede no ser siempre el mismo, podés usar diferentes partes de tus manos).
☑ Soltá el masaje, desperezate y estirate, y date un rato de descanso boca arriba.
¡Que te disfrutes!